Al igual que un superhéroe, su peculiar nacimiento le dotó de poderes
Un animal muy especial que es capaz de mejorar la vida de los demás
Lentil, el protagonista de este video, nació con un paladar que no estaba completamente formado. Su dueña, que hasta entonces debía alimentarle con gran precaución para evitar su asfixia, decidió poner su caso en manos de la Escuela de Veterinaria de la Universidad de Pensilvania. Allí solucionaron el problema físico de Lentil, aunque sin alterar su aspecto.
Al conocer su caso los veterinarios pensaron en lo beneficioso que resultaría que los niños afectados por deformidades en el rostro que visitan el Hospital Infantil de Filadelfia pudieran conocer a Lentil. Como uno de ellos nos dice en el vídeo, «no es un perro usual, es más como yo y me hace sentir especial» (en su página de Facebook puedes verlo acompañado por algunos de esos niños).
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